¿Sabías que la automedicación y la auto suplementación, se consideran actualmente un problema de salud pública a nivel mundial? Esto debido, al gran incremento de ambas prácticas en los últimos años, incluso, llegando a desplazar a un gran número de consultas médicas, y practicándose tanto en países desarrollados, como en vías de desarrollo (1,2,3).
Sumado a esto, la pandemia del Covid-19, incluyendo el confinamiento que se dio en todo el mundo, las “fake news” o noticias falsas, y la alta prevalencia de muertes en varios países, crearon una sensación de paranoia, ansiedad, y angustia o miedo a contagiarse en la población. Esto causó, que las personas recurran a la automedicación, ya sea para prevenir contagios, o para tratar casos sospechosos de Covid- 19, incrementando el grado de automedicación en los últimos años (4,5).
Se sabe que los medicamentos de “venta libre” son relativamente seguros, y pueden incluso brindar beneficios, si se realizan buenas prácticas. Sin embargo, la automedicación inadecuada con estos medicamentos de “venta libre”, puede tener implicaciones graves para la salud, incluyendo la muerte (1).
En el siguiente artículo te contamos todo sobre la automedicación (incluyendo la auto suplementación), los posibles riesgos para la salud que esta implica, y recomendaciones para una automedicación responsable.
En pocas palabras, la automedicación significa tomar medicamentos, sin el consejo o indicación de un profesional de la salud. Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), la automedicación se define como la práctica mediante la cual, las personas tratan sus dolencias y afecciones, con medicamentos que están aprobados y disponibles sin receta médica, y que son seguros y eficaces, cuando se usan según las indicaciones (5).
Además, la OMS menciona que la automedicación, incluye la auto suplementación, y el uso de medicinas complementarias y alternativas, como hierbas medicinales, suplementos nutricionales, productos tradicionales, y remedios caseros. Siendo prácticas que, en la actualidad, conducen al uso incorrecto de medicamentos (3).
Existen 2 tipos de medicamentos. En primer lugar, se encuentran los medicamentos recetados, los cuales como su nombre lo dice, necesitan de una receta o prescripción médica para poder adquirirlos. Y, en segundo lugar, están los medicamentos de “venta libre” o sin receta, los cuales se pueden adquirir sin prescripción médica en las farmacias, o incluso en supermercados y otros puntos de venta (3).
Los medicamentos de “venta libre” y más usados en la automedicación, se clasifican según su acción terapéutica, en 10 categorías (1):
Pero entonces, si estos medicamentos están aprobados para ser vendidos sin prescripción médica, ¿Por qué podrían arriesgar la salud? Pues si bien los medicamentos de “venta libre” son considerados seguros, son la disponibilidad no regulada, y la venta sin restricciones las principales razones que conducen al uso indebido de estos medicamentos (1).
Es importante saber que la automedicación, también puede ocurrir en el contexto de la prescripción médica. Esto quiere decir, que muchas veces los profesionales de la salud prescriben un medicamento, pero el paciente decide por sí mismo cambiar la dosis prescrita, interrumpir el tratamiento, o prolongarlo (2).
Además, existen motivaciones cada vez más amplias y variadas para automedicarse en la población, cómo por ejemplo:
Además, existen otros factores que influyen en la automedicación, como el estatus socioeconómico, el estilo de vida, el fácil acceso a los medicamentos, el costo de los medicamentos, el acceso a internet y la habilidad para usarlo, la influencia de familia y amigos, el nivel educativo, la edad, el género, medicamentos prescritos anteriormente, y sugerencias de medicamentos en periódicos y revistas (3).
Como lo mencionamos en un inicio, la automedicación y, la auto suplementación inadecuadas, pueden tener implicaciones graves para la salud. A continuación, te mencionamos las más frecuentes (7):
Además, la automedicación también puede disminuir el efecto y efectividad del medicamento, disminuyendo las probabilidades de éxito de un tratamiento médico, y poniendo en riesgo la vida de muchas personas. Por lo tanto, es de vital importancia recibir una prescripción médica, con las dosis y tiempo de tratamiento adecuado para cada caso.
Tener buenas prácticas de automedicación, puede traer beneficios para la población en general, cómo, por ejemplo:
Por este motivo, te dejamos algunas recomendaciones, para realizar una correcta automedicación, cuando lo necesites:
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Pierina Vidal Del Carpio
Licenciada en Nutrición y Dietética
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