Actualmente en la industria alimentaria, la inclusión de alimentos fortificados se ha convertido en una tendencia creciente. Estos productos, enriquecidos con vitaminas, minerales y otros nutrientes, ofrecen una solución innovadora para mejorar la nutrición pública, al mismo tiempo que presentan oportunidades únicas y desafíos para los productores. 

 

En este artículo aprenderás…

• Qué son los alimentos fortificados y algunas ideas para que innoves y te inspires en tu producción
• Alimentos fortificados vs. alimentos enriquecidos
• Beneficios y oportunidades de la fortificación de alimentos
• Desafíos y soluciones posibles de la fortificación de alimentos
• Futuro e innovación en fortificación y producción de alimentos

 

¿Qué son los Alimentos Fortificados?

Los alimentos fortificados son aquellos a los que se les ha añadido nutrientes que no estaban presentes originalmente o que estaban en cantidades poco significativas. Normalmente, estos nutrientes suelen ser vitaminas y minerales, sobre todo.

Esta práctica tiene como objetivo aumentar las ventas y, secundariamente, combatir posibles deficiencias nutricionales. Algunos ejemplos son: la adición de hierro y ácido fólico en los cereales, vitamina D en los lácteos, vitamina B12 y calcio en productos veganos. Y la lista sigue.

Muchas veces, los productos infantiles suelen tener fortificaciones de minerales, para apuntar a un sector de la población en etapa de crecimiento, que suelen presentar un requerimiento elevado de nutrientes.

 

Beneficios y Oportunidades de las Fortificaciones de Alimentos

La fortificación de alimentos ofrece beneficios significativos en términos de salud pública. Al complementar la dieta con nutrientes esenciales, ayuda a reducir la prevalencia de enfermedades relacionadas con deficiencias nutricionales, como la anemia (por falta de hierro, folato y vitamina B12) y el raquitismo (por falta de Vitamina D), por citar algunos ejemplos. Además de aumentar la probabilidad de venta a los clientes que buscan un valor nutritivo mayor en los productos alimentarios.

Además, hay un espacio creciente para la colaboración entre los productores de alimentos fortificados y entidades gubernamentales o de salud pública. Estas colaboraciones pueden abrir puertas a incentivos gubernamentales, programas de subvenciones e incluso campañas de educación pública que promueven la ingesta de alimentos fortificados. Estas alianzas también pueden ayudar a los productores a alinear sus productos con las necesidades nutricionales identificadas por estas organizaciones, aumentando así su relevancia y aceptación en el mercado.

 

Fortificaciones y enriquecimientos: ¿son lo mismo?

Sin embargo hay que diferenciar las fortificaciones de los enriquecimientos con nutrientes. Estos últimos se realizan por ley, como es el caso de la sal yodada en Argentina para combatir el bocio endémico, y el enriquecimiento con hierro en la harina de trigo, para paliar enfermedades como la anemia ferropénica. Ambas enfermedades con alta prevalencia en la población. Para esto se establece una normativa legal, es decir, es una decisión gubernamental ayudando a corregir deficiencias nutricionales comunes en la población. 

En cambio, las fortificaciones consisten en decisiones de las empresas y marcas, es decir de los productores de alimentos. Y su objetivo tiene más relación con una estrategia de marketing y de aumento de venta de los productos.

 

Oportunidades para los Productores de Alimentos Fortificados: algunas ideas para inspirarte a innovar

En el contexto actual, donde la salud y la nutrición se han convertido en prioridades para los consumidores, la demanda de alimentos fortificados continúa creciendo. Esta tendencia brinda una oportunidad única para los productores de alimentos, quienes pueden capitalizar este interés innovando y diferenciando sus productos. 

Al fortificar los alimentos con vitaminas, minerales y otros nutrientes esenciales, los productores no solo mejoran la calidad nutricional de sus productos, sino que también pueden acceder a nuevos segmentos de mercado, como el de consumidores conscientes de su salud, familias con niños, atletas y personas mayores.

 

Ejemplos de Fortificaciones Innovadoras de Alimentos:

• Bebidas lácteas fortificadas con Probióticos: Estas bebidas no solo ofrecen los beneficios del calcio y la vitamina D, sino que también incluyen cepas probióticas para mejorar la salud digestiva y fortalecer el sistema inmunológico.
• Bebidas veganas con Calcio, Vitamina D y Vitamina B12: con el objetivo de aportar nutrientes deficientes en veganos y que contienen normalmente las bebidas lácteas de forma natural, fortificar las “leches” vegetales con estos nutrientes es una buena estrategia de mercado ya que ayudará a este tipo de consumidores a cubrir sus requerimientos diarios.
• Pan fortificado con Hierro y Zinc: Especialmente diseñado para combatir la anemia y mejorar la inmunidad, este tipo de pan ofrece una manera fácil y conveniente de incorporar estos importantes minerales en la dieta diaria.
• Pan multipropósito para adultos mayores: Pan fortificado con fibra adicional para mejorar la salud digestiva, ácidos grasos omega-3 para combatir procesos inflamatorios y mejorar la memoria, y vitaminas del complejo B para permitir el correcto metabolismo energético, adecuado para dietas de adultos mayores.
• Bebidas isotónicas avanzadas para Atletas: Bebidas deportivas fortificadas con electrolitos que se pierden por sudoración (cloro, sodio, potasio y el magnesio), carbohidratos para lograr energía sostenida, y vitaminas del complejo B para apoyar el metabolismo energético durante el ejercicio prolongado.
• Yogur fortificado con DHA y ácido fólico para embarazadas: Yogur fortificado con vitamina B9 o ácido fólico y DHA (ácido docosahexaenoico), un tipo de grasa saludable que produce omega-3, ambos son nutrientes esenciales sobre todo durante los primeros meses de gestación, para el desarrollo cerebral y de todo el sistema nervioso del bebé. 
• Galletas de avena con Probióticos y Fibra: Galletas saludables fortificadas con probióticos para apoyar la salud digestiva de las embarazadas y fibra para prevenir el estreñimiento, un problema común durante el embarazo. También pueden servir perfectamente para adultos mayores, que suelen presentar el mismo problema intestinal.

Estos ejemplos muestran cómo la fortificación de alimentos puede abarcar una variedad de productos y beneficiar a diferentes segmentos de consumidores. Para los productores, estar a la vanguardia de estas innovaciones puede significar no solo una ventaja competitiva, sino también una contribución significativa a la salud y el bienestar de la sociedad.

 

Desafíos técnicos en la producción de Alimentos Fortificados y posibles Soluciones

La fortificación de alimentos, a pesar de sus beneficios indudables para la salud pública y el mercado, plantea varios desafíos técnicos que los productores deben abordar para garantizar la efectividad y la aceptación del consumidor.

Estabilidad de nutrientes durante el procesamiento y almacenamiento:

• Ejemplo: La vitamina C, usada comúnmente en jugos y cereales, es sensible al calor, luz y oxígeno, lo que puede disminuir su eficacia durante la producción y el almacenamiento.
• Solución: Utilizar microencapsulación para proteger la vitamina C, mejorando su estabilidad y manteniendo su efectividad durante un periodo más largo.

Mantenimiento del sabor y apariencia originales:

• Ejemplo: La fortificación de la leche con hierro puede resultar en cambios de sabor y color, pudiendo hacer que sea menos atractiva para el consumidor.
• Solución: Optar por formas de hierro que sean menos reactivas y que no afecten el sabor o color, como el hierro bisglicinato. Realizar pruebas de sabor para ajustar la formulación y asegurar la aceptación del consumidor.

Uniformidad en la distribución de nutrientes:

• Ejemplo: En productos como cereales fortificados, puede haber una distribución desigual de nutrientes en diferentes porciones.
• Solución: Mejorar las técnicas de mezcla y procesamiento para asegurar una distribución homogénea de los nutrientes en todo el producto.

Cumplimiento de Normativas y Etiquetado:

• Ejemplo: Las regulaciones sobre la cantidad y tipo de nutrientes permitidos en la fortificación pueden variar según la región.
• Solución: Mantenerse al día con las regulaciones locales e internacionales y garantizar que el etiquetado sea claro y cumpla con todas las normativas pertinentes.

Costos de Producción Incrementados:

• Ejemplo: La fortificación de alimentos puede incrementar los costos de producción debido a la necesidad de ingredientes adicionales y procesos más sofisticados.
• Solución: Investigar y desarrollar métodos de fortificación más eficientes en costos y buscar economías de escala en la producción. Además, se podría recurrir a sumarse a programas gubernamentales que decidan subvencionar parcialmente estos tipos de productos, ya que ayudan a recortar gastos en salud pública, ayudando a corregir deficiencias de nutrientes en la población.

Desafíos en la preservación de alimentos naturales y orgánicos:

• Ejemplo: Fortificar alimentos orgánicos sin alterar su estatus «orgánico» puede ser complicado, ya que muchos compuestos de fortificación no se consideran naturales.
• Solución: Desarrollar y utilizar compuestos de fortificación derivados de fuentes naturales y orgánicas que cumplan con las normativas de productos orgánicos. Actualmente existen diversos laboratorios y startup que desarrollan compuestos innovadores de fortificación naturales. Puedes considerar generar alianzas con ellos. 

 

Innovación en Alimentos Fortificados: ¿qué trae el futuro?

El panorama de los alimentos fortificados está evolucionando rápidamente, impulsado por avances significativos en la ciencia de los alimentos y la tecnología. Este sector promete no solo mejorar la nutrición a nivel global, sino también revolucionar la manera en que consumimos y percibimos los alimentos.

Uso de nanopartículas en fortificación:

La nanotecnología está emergiendo como un método revolucionario para la fortificación de alimentos. Las nanopartículas pueden ser utilizadas para encapsular nutrientes, mejorando su absorción y biodisponibilidad. Esto es particularmente útil para nutrientes que tradicionalmente son difíciles de integrar en ciertos alimentos, como el hierro o las vitaminas solubles en grasas, en productos a base de agua.

Técnicas avanzadas de encapsulación:

La encapsulación no solo protege los nutrientes de factores externos como la luz y el oxígeno, sino que también permite una liberación controlada de nutrientes en el cuerpo. Esto mejora la eficacia de los alimentos fortificados y permite una dosificación más precisa.

Personalización de la nutrición:

Con el avance de la genómica y la biotecnología, la personalización de alimentos fortificados basada en necesidades nutricionales individuales puede ser un siguiente paso para la industria alimentaria. Los productores podrán desarrollar productos específicos para diferentes grupos de edad, condiciones de salud, e incluso adaptados a perfiles genéticos individuales.

Fortificación con compuestos bioactivos:

Más allá de las vitaminas y minerales tradicionales, la fortificación con compuestos bioactivos como antioxidantes, probióticos y fitoquímicos está generando cada vez más atención. Estos compuestos pueden ofrecer beneficios adicionales para la salud, como mejorar la función inmune y prevenir enfermedades crónicas.

Alimentos fortificados sostenibles y orgánicos:

La sostenibilidad y la agricultura orgánica son tendencias crecientes. Desarrollar métodos de fortificación compatibles con prácticas orgánicas y sostenibles es cada vez más crucial para satisfacer la demanda de consumidores conscientes respecto al medio ambiente.

Tecnología de impresión 3D en alimentación:

La impresión 3D de alimentos abre posibilidades para la fortificación personalizada y a medida. Los productores pueden utilizar esta tecnología para crear alimentos con perfiles nutricionales específicos, adaptándose a las necesidades y preferencias de los consumidores.

Mejora del sabor y la textura:

A medida que la tecnología avanza, también lo hace la capacidad de mejorar el sabor y la textura de los alimentos fortificados. Esto asegurará que los alimentos no solo sean nutritivos sino también agradables al paladar, aumentando su aceptación entre un público más amplio.

Integración de tecnología digital y big data:

El uso de big data y análisis predictivo ayudará a los productores a entender mejor las tendencias de consumo y a desarrollar alimentos fortificados que satisfagan necesidades nutricionales específicas y emergentes.

 

En conclusión…

En conclusión, la fortificación de alimentos representa una tendencia significativa en la industria alimentaria, ofreciendo beneficios sustanciales en términos de salud pública y oportunidades de mercado para los productores. 

Al enriquecer los alimentos con vitaminas y minerales esenciales, se abordan problemas de deficiencias nutricionales y se satisfacen las demandas de consumidores conscientes de su salud. Para los productores, esto significa un terreno fértil para la innovación y la diferenciación de productos, con potencial para acceder a nuevos segmentos de mercado y colaborar con entidades gubernamentales. 

Sin embargo, enfrentan desafíos técnicos en cuanto a la estabilidad, sabor, apariencia y distribución uniforme de nutrientes, que deben ser superados para garantizar la efectividad y aceptación del consumidor. La fortificación alimentaria no solo es una estrategia comercial, sino también una contribución importante a la salud y el bienestar de la sociedad.

 

Licenciada en Nutrición Magalí Pezzarini

Nutrición Plant Based y clínica. Nutrición Deportiva.

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